El intendente del distrito itapuense de Jesús de Tavarangüe, Hernán Schlender, fue detenido en la mañana del viernes último. Su detención fue efectuada por parte de efectivos de la sección Investigación de Delitos de Encarnación y Colonias Unidas. Schlender, se encontraba en su estancia, en donde guardaba prisión domiciliaria, cuando fue visitado por los agentes policiales, resolución judicial en mano.
Hernán Schlender quien no brindó declaraciones a los medios de comunicación, fue detenido, tras operativos que se dieron en Jesús de Tavarangüe, por agentes fiscales y efectivos de la SENAD de la capital del país, quienes habrían colectado elementos suficientes que lo vinculan al lavado de dinero proveniente del narcotráfico a través de la municipalidad que administraba, y a través de otros negocios familiares. En la misma mañana del viernes, fue trasladado al penal de Itapúa.
ACERCA DE LOS PROCEDIMIENTOS
8 allanamientos se desarrollaron en el distrito de Jesús de Tavarangüe en Itapúa. Fueron en relación a investigaciones que buscan demostrar la relación del intendente de ese distrito, Hernán Schlender, con actividades de lavado de dinero proveniente del narcotráfico. Se presume, que Schlender, lavó activos por 3.000 millones de guaraníes a depositándolos a la cuenta del FONACIDE de la comuna a su cargo, sin justificar procedencia. Los allanamientos se desarrollaron la municipalidad, en viviendas, estancias y comercios ligados a Schlender y familiares.
Siete fueron los fiscales que procedieron acompañados de varios agentes especiales de la SENAD. El intendente de Jesús de Itapúa, Hernán Schlender, es cuñado del supuesto jefe narco, Wilfrido Bareiro Vargas, alias Peloncho, detenido el año pasado.
Schlender, tenía prisión domiciliaria en una estancia de su propiedad ubicada en la localidad de Jesús, por supuesta lesión de confianza y uso de instrumento público de contenido falso, en perjuicio de la comuna a su cargo, ahora está imputado por supuestos lavado de dinero y enriquecimiento ilícito, y también fueron imputadas, sus dos hermanas, Dolly y María Schlender. Una de estas, abandonó una lujosa camioneta a las afueras de Jesús, tras enterarse de los procedimientos.