La toma de rehén se dio en el interior del penal de Itapúa. Tres miembros del PCC, se fugaron del lugar, secuestrando al jefe de seguridad, José Miguel Medina, no sin antes herir con armas de fuego a los guardias Antonio Martínez y Juan Chaparro.

Fueron con el automóvil del cautivo, a dirección noreste, tierra adentro hacia el distrito de Cambyreta. Posteriormente, el rodado derrapó, por lo que tuvieron que abandonarlo, internándose en una zona boscosa, desde donde iniciaron las negociaciones, con los policías quienes alcanzaron y los tenían rodeados.

Primero, los reos exigían su libertad, y luego, negociaron que se iban a entregar, liberando al rehén, solo acompañados por un medio de prensa que transmita en vivo, el momento de tensión.

El infierno que vivió el guardia cárcel José Miguel Medina, duró unas 5 horas, hasta que, acompañados por una cámara y un camarógrafo, los reos Vicente Antonio Leiva Piatti, de nacionalidad paraguayo, Walter Darío Ayala, de nacionalidad paraguayo, y Jacson Da Silva, de nacionalidad brasileño, entregaron las armas tras ingresar a la guardia del penal.

Los guardias heridos, Antonio Martínez y Juan Chaparro, se encuentran fuera de peligro en el Hospital de Encarnación. A éstos, los reos habrían despojado de sus armas de fuego, una escopeta y dos pistolas, ya que según trascendió, todo inició con la tenencia de una pistola 9 milímetros por parte de uno de los rebeldes.