Estas afirmaciones del ejército israelí ocurren tras un ataque este fin de semana de drones, imputado por el Líbano a Israel, en el bastión del Hezbolá en Beirut, y lo que al parecer fueron disparos de represalia el miércoles por la noche del ejército libanés contra drones israelíes.

El ejército israelí no confirmó el jueves los incidentes ocurridos a los drones en Beirut, pero afirmó que tiene informaciones que prueban que el Hezbolá trataba de convertir cohetes en misiles de alta precisión.

Su plan es “convertir ‘estúpidos’ cohetes en misiles de alta precisión”, declaró en una conferencia telefónica el portavoz del ejército israelí, Jonathan Conricus, quien precisó que el Hezbolá dispone actualmente de 130.000 cohetes en Líbano.

Según el ejército israelí, Irán había tratado de 2013 a 2015 de transportar misiles de su territorio hasta Líbano, a través de Siria, pero después de no lograrlo los iraníes modificaron su accionar en 2016 con el fin de no transportar misiles, sino “convertir” cohetes en misiles de alta precisión.

Según el Times de Londres, los drones cayeron el domingo cerca de instalaciones de Irán donde se fabrica un combustible fundamental para la fabricación de misiles de precisión.

Este ataque fue presentado por el jefe del Hezbolá Hassan Nasrala como “el primer acto de agresión” de Israel en el Líbano desde la guerra de 2006 entre el Estado hebreo y el movimiento chiita armado, que causó 1.200 muertos de lado libanés y 160 de lado israelí.