Según informes dados por intervinientes, el occiso es Marco Pintos, de 55 años de edad. El cuerpo se encontraba en el interior de una precaria vivienda, en el cual residía el fallecido, dentro de un establecimiento privado del cual, él era capatáz.
También se halló un machete con manchas de sangre, que se presume, fue utilizado para cometer el horrendo crimen.
Posteriormente, tras una revisión de la zona, los intervinientes encontraron la cabeza de Marco Pintos, en un cauce hídrico un tanto alejado de la vivienda.
No existen vestigios de que el fin del homicidio haya sido el robo, y aunque se desconoce el móvil, todo apunta a un ajuste de cuentas.
Tampoco se tiene conocimiento de quien sería el o los supuestos autores del hecho, pero, con las evidencias, se podría llegar a conocer al homicida.