Cerro Porteño sigue imparable en el Apertura: arrasó 4-0 con General Caballero, vuelve a depender de sí mismo para ser campeón y le pisa los talones al puntero Libertad, al que enfrentará en la siguiente fecha del torneo.
El Ciclón no tuvo piedad de un pobre equipo mallorquino, que nunca pudo hacer frente al rival. El dominio y la superioridad del equipo azulgrana fue exagerado, de inicio a fin, por lo que el resultado final graficó claramente lo que sucedió en el juego.
El equipo de Manolo Jiménez rebosa de confianza y por momentos demuestra hasta una mecanización casi perfecta, tanto por dentro como por fuera. El DT español optó por rotar a muchos jugadores en todas las posiciones, pero el rendimiento colectivo no varió.
Ante la ausencia de Santiago Arzamendia, Cerro prefirió atacar preferentemente por derecha, zona por donde el chico Gabriel Aguayo, la gran figura del partido, se paseó a placer con todos los laterales que puso Aureliano Torres en el equipo altoparanaense.
El primer gol llegó muy rápido, tras un aluvión azulgrana. En el cuarto de hora, un tiro libre de Rafael Carrascal se coló entre la barrera de dos hombres que puso Gral. Caballero, sorprendiendo a Gustavo Arévalos, quien sacó la pelota, pero desde adentro del arco, algo que fue detectado por el VAR.
El 1-0 le dio otra tranquilidad a Cerro, que viene la nula reacción del rival, volvió a castigar en ofensiva. Tras una jugada confusa en el área y lleno de rebotes para los hombres vestidos de azulgrana, Alan Benítez clavó un derechazo desde ángulo cerrado para firmar el 2-0.
El segundo tiempo fue de mero trámite y solamente sirvió para saber por cuánto iba a ganar Cerro Porteño.
A pesar de los cambios y retoques tácticos, el equipo de Aureliano Torres nunca pudo hacerle frente y equiparar al Ciclón futbolísticamente.
Fernando Fernández y Luis Riveros sellaron la goleada final de 4-0, ambos con asistencias del nuevo chico maravilla de Barrio Obrero, Gabriel Aguayo, el mejor jugador del Ciclón ante General.
Fuente: www.versus.com.py