Según Ferreira, estas restricciones lo primero que generará es el surgimiento de un “mercado paralelo”, que ya ocurrió en el ultimo tramo del Gobierno de Mauricio Macri.

Según informaron desde el Banco Central al matutino argentino Perfil, se trata de un límite de 10.000 dólares por mes, el equivalente a 600.000 pesos argentinos.

En lo concerniente a las empresas, éstas no podrán comprar dólares para atesorar, una medida que también atañe a las entidades bancarias.

El Poder Ejecutivo no estableció ningún límite para extraer dólares, ni hay restricciones en caso de viajes al extranjero o para el comercio exterior.